
Tu academia de inglés
Aprender inglés hablando desde el primer día.
En Well queremos hacer que aprender inglés sea práctico y divertido, mediante clases 100% orales. Nuestros clases inmersivas y un método oral producen unos resultados garantizados. Hablando aprendes más rápido, logras mejores resultados y llegas más lejos.
Hablando, es la forma más intensiva de aprender, y con profesores que quieren que saques el máximo partido a cada clase, las clases se convierten en algo agradable y productivo.
Tu escuela de inglés
Desde nuestros comienzos, siempre hemos apostado por los métodos de enseñanza más eficaces para el aprendizaje del inglés, por eso desde hace más de 20 años vimos que la mejor manera de aprender inglés es hablándolo.
¿Por qué Well School of English?
Porque aprender inglés puede ser complicado: nuestro objetivo es hacerlo lo más simple posible
Porque aprender inglés es normalmente un proceso largo: queremos hacerlo
lo más rápido posible
Porque aprender inglés a menudo es aburrido: En Well intentamos que sea lo más agradable posible

¿Cómo se aprende en Well English?
La respuesta es muy fácil: Si nadar se aprende nadando, conducir se aprende conduciendo, él inglés se aprende hablando.
Las 4 claves en las que basamos nuestros cursos de inglés
VOCABULARIO
Aprender las palabras más importantes.
Necesitas vocabulario: las palabras son la parte más importante del lenguaje. Cuantas más palabras sepas, mejor comprenderás, y mejor podrás expresarte y con mayor precisión. En ‘nuestras clases’ aprenderás de manera sistemática nuevas palabras en cada clase.
GRAMÁTICA
Desarrollar una buena gramática oral para no bloquearte a la hora de hablar.
Necesitas la gramática para comunicarte de forma clara y sencilla. Con explicaciones prácticas, claras ejemplos y el uso frecuente, la gramática se convierte en algo familiar; es una ayuda para comunicarte, no un obstáculo.
PRÁCTICA
Clases centradas en speaking y listening para que realmente seas capaz de comunicarte en el idioma.
Ya tienes el vocabulario y la gramática; sólo te falta el ingrediente mágico que lo haga “realidad”: la práctica. Sin una práctica correcta no te sentirás aún lo suficientemente cómodo para hablar, y ¿quién aprende un idioma si no es para hablar?